Sociales | 28 jul 2024
Barrio Hipódromo
Barrio Hipódromo: Más de dos meses de desperdicio de agua potable
Vecinos denuncian una persistente pérdida de agua en la región y la falta de respuesta de ABSA.
Los residentes del Barrio Hipódromo han vuelto a alzar la voz frente a un grave problema de desperdicio de agua potable que afecta la calle 122 entre 34 y 35. Según las declaraciones recogidas, la pérdida lleva más de dos meses sin ser reparada, convirtiendo la zona en lo que describen como “manantiales a cielo abierto” debido a los caños rotos que no han sido atendidos por la empresa Aguas Bonaerenses S.A. (ABSA).
Esta denuncia se suma a otra registrada ayer, cuando se reportó una situación similar en la intersección de la avenida 38 y Diagonal 80, evidenciando un patrón preocupante de falta de mantenimiento en la red de agua potable de la ciudad.
Un Problema Persistente a Pocas Cuadras
Los vecinos han señalado que la pérdida de agua en 122 entre 34 y 35 ha provocado que la calle se vuelva prácticamente intransitable. “La pérdida está hace más de tres días y no se puede caminar, hay que pasar con kayak. Los autos y micros pasan fuerte y tiran todo el agua a la vereda. Lo peor de todo es que es una pérdida de agua potable”, relataron a El Editor Platense.
Al visitar el lugar, se constató la gravedad del problema mediante videos y fotos que muestran la gran cantidad de transporte público que transita por la zona, afectando negativamente a los comercios ubicados en esa área. La constante circulación de vehículos pesados no solo incrementa el desperdicio de agua, sino que también genera molestias adicionales para los vecinos y comerciantes.
Reclamos Sin Respuesta
Los residentes del Barrio Hipódromo, organizados a través de la Mesa Vecinal del Agua, han presentado múltiples reclamos a ABSA, exigiendo una solución inmediata a esta problemática. Sin embargo, hasta el momento, no han recibido ninguna respuesta ni se han observado acciones concretas por parte de la empresa encargada del suministro de agua potable en la región.
La situación ha generado una creciente frustración entre los vecinos, quienes demandan una intervención urgente para reparar los caños rotos y detener el desperdicio de un recurso tan valioso como el agua potable.
Este caso refleja la necesidad de una gestión más eficiente y responsable por parte de las autoridades y empresas encargadas de los servicios básicos, para evitar que situaciones como estas se prolonguen en el tiempo, afectando la calidad de vida de la comunidad.