Por: Info 360

Motivados por los altos costos del combustible y la necesidad de ajustar gastos, muchos vecinos de La Plata que trabajan en Capital Federal han desarrollado una estrategia eficaz: reunirse cada mañana en la bajada de Villa Elisa de la Autopista La Plata-Buenos Aires y salir juntos en un solo vehículo.

Los vecinos se organizan para viajar de dos, tres o cuatro personas en un auto, pagando la mitad, un tercio o un cuarto de lo que gastarían en nafta y peajes si viajaran solos. Considerando los altos costos del combustible y los peajes, que ascienden a $13.400 en nafta y $1.200 en peajes para un viaje de ida y vuelta desde La Plata hasta el centro de Capital Federal, esta estrategia les permite ahorrar considerablemente en sus gastos de transporte.

El punto de encuentro es la bajada de Villa Elisa, donde cada mañana, entre las 5 y las 6, llegan los autos y camionetas que provienen de diferentes partes de la ciudad. Los residentes de La Plata se agrupan allí, formando una larga fila de vehículos, para compartir el viaje hacia Capital Federal.

Emilia Alzamora, ingeniera de 30 años, comparte el viaje desde La Plata hasta Luján con un compañero de trabajo. Ella explica que esta práctica les permite ahorrar dinero y que desde siempre se han organizado así. Otros como Joaquín, viajan con tres compañeros y pueden reducir sus gastos diarios de $12.000 a $15.000 a solo $4.000 o $5.000.

Florencia Madona, de 29 años, vive en Berisso y trabaja en Palermo. Ella y sus compañeras comparten el viaje en su Peugeot 208, turnándose para poner el auto. Prefieren esta opción antes que el transporte público debido a los paros frecuentes y los horarios tardíos de regreso a casa.

La estrategia de compartir viajes se ha vuelto cada vez más popular entre los residentes de La Plata que trabajan en Capital Federal, ya que les permite ahorrar dinero y reducir el impacto ambiental al disminuir el número de autos en la carretera. A pesar de los desafíos, como el estacionamiento prohibido y los largos tiempos de espera, muchos consideran que vale la pena por los beneficios económicos y prácticos que ofrece esta práctica.