En medio de los debates sobre la continuidad de la cuarentena, el presidente de la Nación definió continuar con la medida de aislamiento social, preventivo y obligatorio luego del lunes. Además, aseguró que serán “más estrictos” los controles en zonas urbanas.

Este miércoles por la mañana el mandatario comunicó la decisión de darle continuidad a las medidas preventivas que se vienen desarrollando para contener la pandemia de COVID-19 y estaban pautadas hasta el 13 de abril. “La cuarentena seguirá y no va a haber ningún levantamiento ni se va a flexibilizar”, aseguró.

Al respecto, también señaló que desde el gobierno se percibe un “relajamiento” de la ciudadanía en el acatamiento de las restricciones. Por este motivo, señaló que los responsables del cumplimiento en las áreas metropolitanas “serán más estrictos y con más controles” de los que hay actualmente.

La continuidad del aislamiento fue definida luego de una reunión con gobernadores y el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, vía videoconferencia. “Todos estamos de acuerdo en que la cuarentena debe seguir”, declaró el presidente en diálogo con el programa televisivo Arriba Argentinos, de Canal 13.

Ayer a la tarde mantuvimos una videoconferencia desde Olivos con los gobernadores para evaluar la situación del coronavirus COVID-19 en cada provincia y analizar las medidas a tomar.

Hoy, más que nunca, los argentinos nos necesitan trabajando unidos y eso seguiremos haciendo. pic.twitter.com/ZAPncwkFOr

— Alberto Fernández (@alferdez) April 8, 2020

Por otro lado, señaló que se encuentran analizando “focalizar en algunas actividades que parecen tener menos riesgo”, pero aún así los cambios en las áreas urbanas serán “ínfimos”.

“La cuarentena debe seguir porque hasta acá estamos bien, pero no conseguimos nada. Estamos a mitad de camino y todo el esfuerzo que hicimos es muy grande como para tener una recaída”, expresó Alberto Fernández.

Respecto a los siguientes pasos a seguir a nivel nacional, explicó: “Los gobernadores presentarán una propuesta provincia por provincia para ver qué actividades se podrían autorizar, y si en algunos pueblos chicos se podría establecer una cuarentena comunitaria donde se flexibilice el aislamiento”.

Desde amplios sectores productivos había grandes expectativas de que algunas actividades comenzaran a reanudarse gradualmente, teniendo en cuenta los grandes costos que en materia económica está ocasionando la pandemia.

Fernández reconoció que “en los industriales hay preocupación por abrir las fábricas y cierta ansiedad que comprendo”, pero pidió escuchar a los expertos en epidemiología, “para darnos cuenta de lo que pasa y cuáles son los riesgos”.

En este sentido, si bien aseguró que la salud es lo que más le preocupa, subrayó que “vamos a hacer todo lo que tengamos que hacer para preservar a las empresas, que son las que le dan trabajo a los argentinos. Haré todo lo posible para que las empresas no cierren”.