

Por: Info360.net
El Día de la Madre en Argentina no surgió con fines comerciales. Su raíz está en una conmemoración religiosa que la Iglesia Católica realizaba el 14 de octubre, cuando se celebraba la festividad de la Maternidad de la Virgen María.
Tras la reforma del calendario litúrgico en 1969, el Vaticano trasladó esa festividad al 1° de enero, pero en Argentina se decidió mantener el homenaje en octubre. Desde entonces, se celebra el tercer domingo del mes, una costumbre que se sostiene más por tradición y afecto popular que por calendario religioso.
Con el paso del tiempo, el Día de la Madre fue ganando también un fuerte componente comercial: promociones, regalos, flores y campañas publicitarias convirtieron la fecha en una de las más importantes para el consumo. Sin embargo, su sentido original sigue siendo el reconocimiento a las madres como figura de amor, contención y esfuerzo.
A nivel mundial, el origen moderno de esta celebración se remonta a Estados Unidos, cuando Anna Jarvis organizó en 1908 el primer homenaje oficial en memoria de su madre, Ann Reeves Jarvis, una activista que ayudaba a madres trabajadoras durante la posguerra civil. En 1914, el presidente Woodrow Wilson estableció la fecha como una celebración nacional el segundo domingo de mayo.
Con el tiempo, la tradición se extendió por todo el mundo con distintas fechas y significados, fusionando raíces religiosas, afectivas y sociales. En Argentina, octubre mantiene su propio sentido: más allá de lo comercial, es un día para celebrar el amor maternal y agradecer la presencia de las madres en todas sus formas.