

Por: info30.net
Tras casi un mes de incertidumbre, la investigación por el asesinato de Pablo Pedro Mieres, el joven profesor de Química hallado sin vida en su casa del barrio Hipódromo, dio un giro clave. Este lunes, efectivos policiales detuvieron en Berisso al principal sospechoso: un hombre en situación de calle que frecuentaba una estación de tren cercana al domicilio de la víctima.
La detención fue ordenada por el fiscal Gonzalo Petit Bosnic, a cargo de la UFI N°17, en el marco de una causa caratulada como homicidio criminis causa. Uno de los indicios clave fue una filmación donde se ve al acusado con el mismo buzo que llevaba al momento de su arresto.
Según la hipótesis más firme, el encuentro entre Mieres y el sospechoso habría sido pactado de forma voluntaria. Sin embargo, en algún momento la situación derivó en un ataque brutal: el agresor lo habría golpeado, atado con cordones de zapatillas y estrangulado con una prenda de vestir. Luego, sustrajo objetos de valor y dinero, aunque algunos electrodomésticos quedaron en el lugar.
El cuerpo de Mieres fue encontrado el 16 de junio, desnudo, con signos de violencia y ataduras. La autopsia confirmó que murió por asfixia mecánica. Su muerte conmocionó a la comunidad universitaria platense: tenía 30 años, era licenciado en Biología Molecular y se destacaba por su labor social y académica.
Desde la Facultad de Ciencias Exactas lo recordaron como un referente comprometido con la universidad pública y solidaria. Su rol durante la pandemia y su participación en brigadas de asistencia en barrios populares lo convirtieron en una figura muy querida por colegas y estudiantes.