Por: Info360.net

El arquero de Independiente, Rodrigo Rey, enfrenta una batalla fuera del campo por la educación de sus hijos. El colegio donde asisten, en City Bell, decidió no renovar las matrículas de Benicio, de 8 años y diagnosticado con TEA, y de Renata, de 16 años. Rey y su esposa, María Laura, ven esta decisión como una represalia tras haber denunciado en junio la falta de inclusión hacia su hijo menor.

Tras su publicación en redes, el colegio respondió con una carta documento pidiendo una retractación. La familia Rey, lejos de ceder, envió una respuesta exigiendo que se cumplan las normativas legales en favor del neurodesarrollo de Benicio. Según Carla Junqueira, abogada de la familia, la relación con la institución estaba desgastada, pero la exclusión también de Renata resultó un golpe inesperado.

Rey utilizó sus redes sociales para expresar su frustración. "A veces parece que defender los derechos de tus hijos molesta y, en represalia, deciden sacar a tus hijos de sus espacios", escribió. El arquero destacó que la visibilidad del caso ayudó a generar conciencia sobre las dificultades que enfrentan muchas familias con hijos con autismo.

El exjugador de Gimnasia resaltó los avances de Benicio gracias al apoyo de sus amigos en el colegio. Pese al conflicto, la familia continúa luchando por un fallo judicial que permita a ambos niños seguir en sus entornos escolares. "Seguimos esperando con la ilusión de poder contarle a nuestro hijo que podrá seguir en su curso con sus amigos", concluyó Rey en un mensaje emotivo.