Económicamente quien pone más acento en la igualdad es de centro izquierda. Quien pone mayor acento en la libertad, de centro derecha. Estas son dos categorías con significaciones y aplicaciones diversas en cada país. En Canadá por ejemplo, el liberalismo es sólo en materia política, pero en materia económica se brega por la regulación del Estado en los asuntos económicos. En cambio los liberales en Argentina tienden a serlo sólo en lo económico, y hasta por ahí no más.

El neoliberalismo está en contra de la emisión monetaria y del incremento de planes de contención social. Dos cosas que hizo Mauricio Macri.

El presidente fue liberal sólo en dos aspectos. En materia salarial, licuando los salarios reales en dólares a menos de la mitad, en relación con el año 2015. Esto lo hizo con el esquema de flotación administrada del dólar. Y en determinada apertura económica en sectores sensibles, como el textil o abriendo la competencia aeroportuaria. También puso el impuesto a la renta financiera, que es una medida tributaria que podríamos catalogar de heterodoxa.

La parcelación de la administración de la economía terminó en un mar de incongruencias ideológicas.

El gobierno intento hacer un ajuste gradual de la economía, para evitar un shock, que solo ejerció en materia tarifaria.

Por otra parte el Kirchnerismo fue heterodoxo en materia monetaria y salarial. Impulsó el consumo, la producción y el empleo. Con esta receta keynesiana también aumentó la recaudación. Si aumenta el consumo, aumenta la producción, si aumenta la producción, aumenta la demanda
de empleo por parte de las empresas. Si las empresas venden más, el Estado recauda más. También es cierto que el kirchnerismo mantuvo una estructura tributaria regresiva, realizó muy mal un proceso de sustitución de importaciones sin éxito. Donde se prohibía la importación sin generar antes la sustitución local, y no al revés, como corresponde. Eso generó irritabilidad social en consumidores y empresarios.

Tampoco cuidó el medio ambiente con prácticas como el fracking o sin promover la rotación de campos, con el tema de los agroquímicos. En Francia y en México, directamente fueron prohibidos, por dar dos ejemplos.

Para el año 2007 la Argentina tuvo superávit fiscal y comercial, para el 2015 sólo un comercial bajo, estadísticas poco confiables, y un déficit fiscal enorme, de 5 puntos del PBI.

Las categorías eurocéntricas en Argentina sirven poco, para comprender la Argentina. Tiendo a creer que los gobiernos llegan con una impronta ideológica siempre, pero que la realidad, las asimetrías, y las necesidades políticas obligan a los mismos a modificar sus hojas de ruta.

Por Manuel Fenicio.