Por: Redacción Info360

En las últimas horas, el maestro de la comedia Hollywoodense, Jim Carrey, anunció un retiro con suspenso de su carrera como actor cinematográfico, en el marco del estreno de su última película, “Sonic the Hedgehog 2”.

En diálogo con Access Hollywood, el comediante y protagonista de interminables clásicos del del rubro sostuvo que sus declaraciones iban “en serio” y que se encuentra decidido a concluir su trayectoria en la pantalla grande.

Al respecto, contó que se encuentra abocado a otras actividades, destacando que ama “poner pintura sobre el lienzo” y también la “vida espiritual” que lleva. “Siento que ya tengo suficiente. He hecho suficiente. Es suficiente”, sentenció al respecto, confirmando su deseo de modificar sus hábitos artísticos.

En ese sentido, profundizó en sus planes indicando que se volcará a los No Fungible Tokens (NFT), que buscará vender en un espacio llamado Magic Hour. Se trata de imágenes de diverso origen y procedencia, así como videos, que circulan dentro de la blockchain, tecnología de intercambio digital que registra y encripta cada transacción realizada.

En ese mercado, se ha vendido por cifras multimillonarias desde dibujos y obras de arte hasta capturas de pantalla de tweets icónicos, y todo tipo de objetos digitales.

No obstante, Carrey advirtió que no se trata de un retiro indeclinable, aunque un eventual retorno depende de que se le acerque un proyecto que le resulte brillante: “Si los ángeles traen algún tipo de guión que esté escrito con tinta dorada, que me diga que va a ser muy importante que la gente lo vea, podría hacerlo”.

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— Jim Carrey (@JimCarrey) March 16, 2022

El presuntamente último rol de Jim Carrey en la pantalla grande.

El actor se ha convertido, desde mediados de los ‘90, en un auténtico ícono de la comedia hollywoodense -aunque su carrera no se ciñó exclusivamente al género- protagonizando tan sólo en 1994 clásicos como Ace Ventura, La Máscara y Tonto y Retonto.

En los años subsiguientes, continuaría interpretando grandes personajes que quedarían en el imaginario de la audiencia alrededor del mundo, en piezas como Mentiroso, Mentiroso; la ambiciosa comedia dramática The Truman Show (por la cual recibió el Globo de Oro en 1999) y la biográfica Man on the Moon, donde personificaba al comediante Andy Kaufman y por la cual también ganó el Globo de Oro en el 2000.

En el nuevo milenio, también interpretó roles cómicos en El Grinch, Irene y yo y mi otro yo, Las Locuras de Dick y Jane o Sí, Señor. Pero también hubo papeles dramáticos como en Eterno Resplandor de una Mente sin Recuerdos, que contó con una gran valoración entre los cinéfilos; e incluso roles de suspenso como en el thriller psicológico Número 23.

Sin dudas se trata de un artista que quedará en la memoria de millones como ícono de una generación cinematográfica y una forma de hacer humor en la pantalla grande. Su retiro marcará un punto de inflexión en la industria, al igual que lo hizo días atrás la noticia del retiro de Bruce Willis, uno de los grandes referentes del cine de acción de las últimas décadas del siglo pasado.