Por: Redacción Info360

La impactante toma de rehenes ocurrida en la localidad bonaerense de Caseros desde la medianoche de este martes terminó de la peor manera, luego de que se verificara la muerte de la víctima, del perpetrador y el saldo de al menos tres efectivos policiales heridos.

El secuestrador era un hombre de 42 años que se encontraba “totalmente enajenado” según había precisado el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni.

La situación había sido desencadenada por una situación de violencia de género ocurrida durante una cena de parejas amigas en un PH ubicado en la calle Tres de Febrero al 3900.

Allí el agresor, identificado como Alejandro Maldonado, había llegado a tomar del cuello a su esposa, que se terminó retirando del lugar luego de que interviniera el amigo presente, Alfredo Cáceres, de 47 años.

En diálogo con la prensa, Berni precisó que el hombre “estaba totalmente enajenado” y que “quiso estrangular a la mujer a tal punto que la asfixió”, tras lo cual él mismo le practicó RCP. Allí habría intervenido el amigo, cuya situación el ministro puso en duda: “No queda muy claro si era un rehén o -según declaraciones- estaba con él. Es una situación que el fiscal intentará reconstruir”.

A lo largo de la noche de negociación, Maldonado, que era electricista, efectuó alrededor de 300 disparos, por lo cual la situación había sido calificada como “peligrosísima”. Según pudo revelar el funcionario, la casa era una suerte de “búnker” y el hombre estaba emplazado en una posición “prácticamente infranqueable”.

Además, el titular de la cartera de seguridad aseguró que “durante toda la noche la negociación fue negativa” y que los intentos por contactar a la otra persona fueron siempre fallidos, por lo cual presumían que ya se encontraba muerta. Incluso comentó que el fiscal le había pedido que lo acompañe a dialogar, aunque “fue imposible, porque cada vez que hablabamos respondía con tiros”.

En tanto, la psicóloga experta del equipo “determinó que estaba en un delirio paranoico totalmente descontrolado”, lo cual explicaría las balaceras.

Luego de la orden del fiscal de ingresar al lugar, cuando Maldonado comenzó a incendiar la casa, Berni detalló: “Para que tengan una idea de la fortificación, ni siquiera por la puerta se pudo entrar, hubo que romper la pared”. El médico que revisó a Cáceres calculó que la víctima llevaba al momento del ingreso del Grupo Halcón entre 5 y 6 horas de fallecida.

Finalmente, fueron tres los agentes heridos durante el procedimiento -a pesar de que había trascendido que eran cuatro-. Uno de estos se encuentra en grave estado tras ser alcanzado por un proyectil en su arteria femoral y es intervenido quirúrgicamente por estas horas. Las pericias e indagaciones de rigor quedarán en manos de gendarmería.