Durante años la robótica fue sinónimo de ciencia ficción, pero esa barrera acaba de romperse. El Unitree G1, un robot humanoide diseñado en China, ya se vende en los Estados Unidos y marca el ingreso definitivo de la inteligencia artificial al mundo cotidiano.
El gigante minorista Walmart comenzó a ofrecerlo a un precio de 21 mil dólares, muy por debajo de las previsiones del mercado. Incluso, en la web oficial de Unitree Robotics, la compañía creadora, se consigue por 16 mil dólares. La cifra sorprende: un asistente robótico con IA avanzada, visión 360° y movimientos humanos, ahora está al alcance de un consumidor promedio.
El G1 mide 1,30 metros, pesa 35 kilos y aprende observando. Su sistema de aprendizaje por imitación replica gestos y movimientos con una fluidez que asombra a los expertos. No es un juguete ni un experimento: el robot puede manipular objetos con precisión, desplazarse con autonomía durante dos horas y comunicarse mediante voz modulada.
La presentación del modelo en Puerto Madero, meses atrás, ya había causado furor en redes sociales. Pero su desembarco en Walmart marca un cambio de era: los humanoides dejaron los laboratorios y pasaron a las góndolas.
Cada día, el G1 actualiza su inteligencia con nuevos datos y experiencias. Es un asistente, un observador y, quizás, el primer paso hacia una convivencia cotidiana con máquinas capaces de aprender de nosotros.