El viernes 28 de marzo, La Plata y el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) quedarán sin servicio de colectivos debido al paro de 24 horas convocado por la Unión Tranviaria Automotor (UTA). La medida se debe al estancamiento en las negociaciones salariales entre el gremio y las empresas del sector.
A pesar de que la Secretaría de Trabajo citó a una nueva audiencia para el 3 de abril, los choferes decidieron avanzar con la huelga. "Las empresas no han realizado ninguna oferta de aumento, dejando a miles de trabajadores sin respuestas", expresaron desde la UTA en un comunicado.
El Gobierno aún no ha decidido si dictará la conciliación obligatoria, lo que podría frenar el paro y reabrir la negociación. Sin embargo, desde el sector empresario insisten en que no pueden otorgar aumentos sin una actualización del precio del boleto o una mejora en los subsidios.
El impacto del paro será fuerte: más de nueve millones de pasajeros diarios dependen del transporte público para trasladarse. En La Plata, las líneas locales e interurbanas quedarán paralizadas, afectando a trabajadores, estudiantes y comerciantes.
Mientras tanto, la CGT sigue de cerca el conflicto, ya que la resolución del reclamo de la UTA podría influir en la adhesión al paro general previsto para el 10 de abril. La tensión sigue en aumento y las próximas horas serán clave para definir si el servicio finalmente se restablece o si la medida de fuerza se concreta.