Un aterrador descubrimiento sacudió a la localidad de Quilmes, donde la Policía Bonaerense encontró 17 cráneos humanos en la ribera, tras la denuncia de un automovilista. El hallazgo ocurrió en la playa ubicada en la rotonda de las calles Cervantes y Echeverría.
Las autoridades trabajan con tres hipótesis principales: que los restos sean de origen arqueológico, que estén vinculados a un crimen o que pertenezcan a víctimas de la última dictadura cívico-militar. Aún se desconoce su antigüedad y cómo llegaron al lugar.
Además, una testigo declaró que, la noche anterior al hallazgo, vio a un grupo de personas realizando lo que parecía ser un ritual de la religión umbanda en la zona. Esto abrió una nueva línea de investigación.
La Unidad Funcional de Instrucción N°5 de Quilmes ordenó peritajes para determinar el origen de los cráneos y su posible conexión con delitos o prácticas rituales. Mientras tanto, el hallazgo genera conmoción en la comunidad.