A comienzo de semana se llevó a cabo una reunión en la sede de la Secretaría de Convivencia y Control Ciudadano para debatir la relocalización de la zona roja en La Plata, desde hace más de 50 años.
De esta manera, la misma deberá ser relocalizada y el municipio tendrá la tarea de garantizar medidas de seguridad, higiene y una reglamentación clara para realizar la actividad y que las y los trabajadores sexuales se encuentren protegidos. En ese sentido, está prevista la instalación de luminarias, una caseta o punto de control, y la posibilidad de implementar también baños químicos, entre otras medidas.
Junto al municipio están trabajando de manera coordinada el Ministerio de la Mujer, el Ministerio de Seguridad, el Concejo Deliberante y vecinos representados por la Asamblea
“Este es un gran avance para los vecinos y los/las personas que ofrecen servicios sexuales, luego de varias décadas en el lugar, podrán contar con un espacio qué le brinde seguridad e higiene, en un punto estratégico donde no afecte el normal funcionamiento de la ciudad ni de los vecinos platenses”, aseguró Néstor Pulichino, Secretario de Seguridad en Políticas Públicas de la Municipalidad de La Plata.
Hasta el momento, se plantearon diferentes propuestas aunque todavía no se resolvió cuál será la nueva zona que ocupará la actividad debido a que, en primera instancia, se hará un estudio de zonas estratégicas.
Las partes entienden que la decisión debe definirse lo antes posible; de hecho, ya había existido una reunión el miércoles de la semana pasada para abordar la problemática.
Dentro del artículo que se refiere a servicios sexuales en el nuevo Código de Convivencia, se establecen sanciones como la siguiente: “El que ofreciere, solicitare, negociare o aceptare directa o indirectamente servicios sexuales retribuidos, en los espacios públicos no autorizados, será sancionado con multa de 100 a 900 módulos”.